La reforma dizque heducativa


Autor (es):
Rius (Eduardo del Río)
ISMB: 978-607-316-036-0
Género: Ensayo/Caricatura política
Editorial: Grijalbo
Número de páginas: 118.
Saga: No es necesaria
Sinopsis: "El niño no es una botella que hay que llenar, sino uno fuego que es preciso encender", decía Montaigne, citado por el maestro Rius. Aquí se escudriñan sin pudor alguno las reformas educativas que han sumido a nuestro país en la ignominia de la mediocridad pedagógica. ¡Ahí nomás!

Rius sataniza y pone en evidencia los ponzoñosos yerros y la grave corrupción que la clase política ha cometido en las políticas gubernamentales promovidas en todos los niveles de instrucción educativa; pero no sólo eso, para que no digan que nada más critica, también propone una serie de recomendaciones que echan luz sobre la forma en que los jóvenes e infantes de México deben conducirse en su paso por las aulas.


¡Hola a todos! Mis queridos seres míticos. Ya sé que he estado con mucha actividad estos días, pero es necesario. Sobre todo porque al fin he leído un excelente libro del DIOS RIUS. Ya les había hecho algunas reseñas de este genial autor de caricatura política que, en lo personal, es mi favorito. Su manera de contar las cosas es increíble, de manera que les dejo por acá las reseñas anteriores para que tengan una idea de qué van las cosas: La droga que refrescaLa revolucioncita mexicana y Vera historia del tío Sam. Como pueden ver, en serio me gusta lo que este hombre escribió. Espero que se interesen por alguna de esas reseñas -o por todas- y que procuren adquirir sus libros. Pero, publicidad aparte, comencemos con la reseña:

He de decir que en este ejemplar no deberán esperar tantas ilustraciones como antes. Rius nos lo aclara desde el prólogo donde nos cuenta que ya es un hombre demasiado mayor, que ya no ve como antes y, por ende, ya no puede dibujar. Pese a eso, tiene una opinión que contar y se valió de la tecnología para lograrlo. No sé si es el último libro de Rius, pero se siente, en parte, un poco de esa manera, como una especie de despedida, de última queja por este país en el que vivimos y que todos deseamos mejorar, aunque sea un poco. Él lo hizo desde su trinchera: los dibujitos.

Intentaré concentrarme en este ejemplar particular y procuraré no irme por las ramas. Una disculpa si no cumplo mucho mi palabra, pero aquí vamos. 

Su libro me encantó, principalmente, porque se trata de un ensayo que no se siente como ensayo. Es más bien una conversación que Eduardo tiene esta capacidad de contar las cosas, la historia sobre todo, y hacerla interesante. No es esta cátedra educacional donde te repasan fechas, nombres, hechos, como si tuvieras que aprenderlos y memorizarlos. Se limita a contarlos, a decirte cómo afectan a la educación tanto presente como pasada y futura. Por lo demás, la realidad es que ese ensayo se convierte en algo ameno de leer, algo que no cuesta, que informa e interesa a la par, cosa que agradezco muchísimo en particular. Cualquier cosa que se vuelva didáctica es bienvenida. 

Ahora bien, hablar de su teoría es hablar de la posibilidad imposible, como bien la describe Rius. Creo y comparto con él la teoría de que México jamás podrá progresar debido a que aplican sistemas educativos de países extranjeros en gente local. Lo explico de manera rápida. Un mexicano no piensa ni se comporta igual que un francés, por ejemplo. Entonces, ¿por qué aplicar métodos de enseñanza franceses pensados para un francés con mexicanos que tienen maneras de aprender mexicanas? La manera de aprender es distinta, de manera que no ayudarán en nada -o en muy poco con algo de suerte- esos métodos. Así pues, como Rius dice, creo que el problema radica en que nos pasamos la vida buscando ejemplos a seguir en lugar de inventarnos uno completamente nuevo que sea pionero en nuestro país y se adapte a las personas que aquí vivimos. Con ello, claro, vienen otras varias teorías que abarcan de todo, desde los sindicatos hasta la religión. 

Así pues, con esto en mente, cortísimo, lo sé, le recomiendo este libro a todos, pero más que nadie a los adolescentes, a las personas que planeen ser padres, a los adultos que quieran saber una manera de hacer las cosas; pero más que a nadie, a los MAESTROS. Espero que, más que tomarlo como una ofensa o como una crítica personal, lo razonen. Que se den cuenta de la realidad de las cosas, de lo complicado que es o puede llegar a ser, de la manera en que su papel es IMPORTANTÍSIMO en la sociedad. No basta con recibir un sueldo, esto va mucho más lejos. 

Y como siempre que termino una reseña de Rius, me despido con un "saludos enormes" y un ¡Qué viva la revolución!








2 comentarios:

  1. HOLAAA
    Lo tengo en la lista hace un tiempo, espero leerlo pronto n.n

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    Respuestas
    1. Hola. Espero que lo leas pronto y, cuando lo hagas, corras a decirme qué tal te pareció. Pocas personas conocen este libro y, sinceramente, me muero de ganas por comentarlo.
      Saludos enormes.

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