Rebelión en la granja
Rebelión en la granja supone también una fuerte crítica que describe los fallos del comunismo. Otro tema frecuente en esta obra literaria es el uso de la fuerza y la violencia como medio de control social, llegado a las persecuciones y el exterminio de la oposición interna dentro de la granja.
El día de hoy vengo a ustedes con un libro clásico que, la verdad, no me había animado a leer hasta que me topé con su última línea, esa que cierra todo el ciclo de algo maravilloso. Además porque el esposo de mi yo mortal lo compró y se lo recomendó muchísimo. Entonces aquí me tienen, terminándolo y reseñándolo al momento.
No les hablaré mucho de la sinopsis en sí, o de la trama en general, porque para eso está el cuadrito que tenemos arriba en color gris. Sería repetitivo, lo que si haré es opinar al respecto. Lo maravilloso de este texto es, a mi ver, su forma atemporal. Fue escrito en una época donde los animales tiraban de los transportes y las granjas eran cosa de todos los días y, sin embargo, todo lo ahí expuesto es algo que la sociedad actual vivimos día a día. Por medio de una fábula, Orwell nos muestra el lugar que ocupa cada persona en esta sociedad, la manera en que se comportan y cómo, al final del día, la política y el poder comprado siempre triunfarán sobre el sentido común. Creo que me he sentido terriblemente identificado con el libro porque es, en el término más literal de la palabra, lo que ocurre diariamente con mi país. Mientras lo leía no me imaginaba a los animales, me imaginaba a una serie de personajes políticos conocidos y mediáticos caminando a cuatro patas o con cuerpo de animal. Ni más ni menos. Aquí aprovecho para recordarle al señor presidente de mi país a la más vieja de su familia. Pero bueno, sigamos.
Los personajes son la piedra angular del texto. En ellos se representa a los diferentes tipos de clases sociales y personas que existimos en un entorno como el que marca Orwell, claro, si tomamos la granja como un país pequeño. Muestra la ignorancia de las masas, muchas veces voluntaria, y la manera en que unos cuantos intentan salir adelante a pesar de todas las adversidades. Claro que, como en cualquier historia, existen las traisiones y todo ese asunto y, para eso, tenemos animales específicos. Conforme avanza la historia y vamos viendo el comportamiento de tal o cual personaje, nos vamos identificando y dándonos cuenta qué somos nosotros y cómo encajamos en la sociedad que vivimos.
Me parece que es esto, esa autoinspección social, lo mejor que nos deja el libro. Para rematar, no lo hace de una forma escolarizada, no te dice que debes o no hacer tal o cual cosa. Te muestra incluso la manera de evitar todo esto, de llegar más allá. El asunto es la forma en que lo hace, la fluidez con qué lo cuenta y la sátira que maneja.
Ya para terminar, diré que recomiendo a todo el mundo este libro, mejor dicho, a todo el que tenga más de diez y ocho años, al que quiera realmente salir de la media y comenzar una revolución, aunque sea mental. En general, a todo el inconforme social que quiera burlarse un poco del lugar donde vive. Un libro altamente recomendable.
Saludos enormes,