Libros VS Ebooks

No, que nadie piense que esto es un VS en un día equivocado. Se trata de nuestro regular "De hojas y tinta" que el día de hoy viene con el debate eterno de todo lector. Libros en papel o libros en digital. ¿A que es sencilla la sección de el día de hoy?

Con toda franqueza, yo me inclino más por los libros en papel, así que comenzaremos con ellos para internarnos un poco en todo este mundo del debate.

Los pros que yo le veo, porque me parece más sencillo comenzar con eso, es, en su mayoría, que no es necesaria la electricidad para disponer de ellos. Es tan simple y sencillo como abrirlos y comenzar a leer. Creo que la disponibilidad es en su mayoría la ventaja más grande. Muchos otros dirían que pueden encontrarlos gratis, lo que los hace aún más geniales. Lo cierto es que a mí, sinceramente, no me parece una de las más grandes ventajas de los libros en papel. Sin entrar mucho en controversia a este respecto, pensemos en algo: si las editoriales no reciben dinero porque nadie compra legalmente los libros, no tendrán con qué invertir en más escritos nuevos, por ende, nos quedaríamos completamente sin libros. No digo que no haya descargado gratuitamente, digo que en su mayoría, desde que trabajo, los he comprado en papel con ese fin. De igual manera, existen bazares de libros donde, por lo menos yo, los he conseguido en 5 pesos mexicanos o un dólar la libra de libros en Estados Unidos. Lo cierto es que conseguir rebajas es sencillo. Al igual, soy miembro de varias librerías que hacen descuentos mediante la acumulación de puntos en tarjetas de miembro (valga la redundancia). 


Es aquí donde me viene otra ventaja. Si bien me parece que ambos dañan la vista, en gran medida los libros digitales, por la luz del celular o computadora, son los que afectan más. Como dirían los mayores: "de los males, el menor". Al menos esa es una ventaja, mínima, pero ventaja al fin, que yo le veo a los libros en papel. 

Ya que si se interesan en ventajas más superficiales, por decirlo de alguna manera, la nada despreciable atención que se puede recibir con un libro en las manos es enorme. Quien posee uno de estos ejemplares entre sus huellas dactilares capta miradas de interés. Seas o no seas un genio, al menos lo parecerás. 

Como desventaja, he de volver al precio. Lo admito al final de cuentas. Un libro nuevo, de los que todos queremos leer, cuesta más que una botella de cualquier bebida embriagante, lo que es deprimente. Si quieres un libro de "moda" (por llamarlo de alguna manera), deberás dejar la mitad de tu sueldo mínimo en la librería. Incluso con tarjeta de miembro hay que decir que el descuento no es demasiado.

Luego nos topamos con el espacio. 

Recientemente me estoy mudando y me he dado cuenta que los libros pueden llegar a ser un problema. El lugar a donde voy es más pequeño que donde estoy y me cuesta organizar mi biblioteca. La adoro, no me desharé de ningún libro, pero sigo pensando dónde Mefistófeles voy a meter todos los libros que poseo. 

Para finalizar, existen otros factores, quizá secundarios, de los libros en papel. Como esa sensación que te da al quitar el papel transparente de la tapa. Analizar la cubierta, memorizarla, aprenderla, oler sus hojas, sentir la textura, disfrutar de la lectura con una buena bebida y una manta caliente en una tarde tranquila. Estas, quizá, son las ventajas más grandes que los libros electrónicos no podrán superar ni queriendo. Al menos a mi ver.

Ahora bien, vamos con la contraparte.

Si hablamos de Ebooks, lo cierto es que yo no tengo mucho que decir, que no he experimentado demasiado con estos seres. Las ventajas que le veo son la contraparte de los libros en físico. El espacio, primero que nada, y la organización. Es sencillo organizar por carpetas en la computadora o el celular, poner todo por autores, en el orden que nos guste e incluso adaptar la letra de una manera que nos sea mucho más sencillo leer el contenido. Creo que primordialmente esa es la ventaja más grande. 

Retomando el precio, si descargamos gratuitamente sin lugar a dudas tenemos otra ventaja, aunque los que descargamos de lugares legales estamos a la par que aquellos que compran libros en papel. A ese respecto lo dejaremos en un empate en toda regla. Por otro lado, los Ebooks son muchísimo más sencillos de transportar a donde quiera que se vaya. Pero aquí es donde comienzan las desventajas. Los Ebooks, sin importar su presentación, tienen un límite de tiempo marcado por las baterías, cables o conexiones eléctricas.

Por lo demás, creo que ya expuse las desventajas generales, la carencia de todo aquello que hace a un libro más accesible.

Me parece que, al final del día, lo que cuenta es el contenido, lo que nos hace viajar de un lugar al otro sin necesidad de salir de casa. Eso es lo que debería contar dejando de lado las cosas con las que nos sentimos más cómodos para llegar a ese punto.

Ahora les toca a ustedes decirnos en los comentarios qué piensan sobre este pequeño debate. Si creen que he olvidado algún pro o contra respecto a determinados libros o si, definitivamente, coinciden conmigo en los puntos que he dado. Saben que sus comentarios siempre serán respondidos uno a uno.

Sin más para comenzar una discusión (que pedimos que sea tranquila y con argumentos), se despide su amigo,