Inferno


Autor (es): Dan Brown.
ISMB:  978-0-385-53785-8.
Género: Thriller, suspenso.
Editorial: Planeta.
Número de páginas: 640 páginas.
Saga: 4/4.
Sinopsis: En el corazón de Italia, el catedrático de Simbología de Harvard Robert Langdon se ve arrastrado a un mundo terrorífico centrado en una de las obras maestras de la Literatura más imperecederas y misteriosas de la Historia: el Infierno de Dante. Con este telón de fondo, Langdon se enfrenta a un adversario escalofriante y lidia con un acertijo ingenioso en un escenario de arte clásico, pasadizos secretos y ciencia futurista. Apoyándose en el oscuro poema épico de Dante, Langdon, en una carrera contrarreloj, busca respuestas y personas de confianza antes de que el mundo cambie irrevocablemente.

Opinión personal: La cereza del pastel. Ni más ni menos con eso nos hemos topado de frente. El día de hoy les traigo uno de los libros en que la objetividad no es mi fuerte, nuevamente.
Bien, comencemos hablando del personaje del que, el día de ayer, me quejé tanto. El salto existencial que da Robert Langdon en esta entrega me parece tan genial que, a grandes rasgos diré, fue el mayor acierto del autor. Se nota que Brown se percató del error garrafal que estaba comentiendo al deshumanizar a Langdon y, en este libro, vemos a un Robert fuera de su elemento por completo, temerosos, con problemas más allá de su siempre recurrente fobia a los espacios pequeños. Creo que es Langdon más real que tiene el autor desde que lo conocemos y eso hace, en parte, que nos lleve mejor de la mano en esta entrega.

Ahora bien, vayamos por la trama. Si bien las dos primeras historias me gustaron mucho, luego de la decepción de la anterior, me parece que leer Inferno es el paraíso en la tierra. Por un lado tenemos la buenísima idea de tratar un tema tan actual y tan real como es la sobrepoblación mundial, y por el otro tenemos la brillante mente de un villano que no estamos seguros si es un villano o no. Esto creo que me llamó la atención más que otras cosas, principalmente, porque pocos autores logran esta maravilla de sacar al malo de su casilla. ¿Es malo realmente quien intenta hacer un bien mayor a costa de todo? Esa cuestión es, para no hacer la historia larga, es lo que me llevó a leer este libro.

Por imagen, Brown no nos queda a deber, ya que lo sabemos maestro en el arte de plasmar objetos de arte, en este caso una máscara mortuoria, y los muchos lugares de Italia por donde nos lleva así como a los acompañantes y amigos de Robert Langdon. Por si fuera poco (y este es un elemento que no puedo evitar adorar), Brown usa la obra maestra llamada "Infierno", de Dante, para crear sus enigmas, su camino al tesoro como lo llamaba en "El código Da vinci". Así que para todos aquellos que no estén familiarizados con esa gran obra, les recomiendo que por lo menos le den un repaso de vista al esquema del infierno, para que no se pierdan demasiado. Claro que, todos aquellos que hemos leído la obra podremos disfrutar de ciertos detalles que van mucho más allá dentro de los enigmas.
Sin lugar a dudas fue un libro mucho mejor pensado que todos los anteriores, con una trama que no sólo entretiene y reta nuestra inteligencia, sino que nos pone a pensar sobre la moralidad mundial actual. Más allá de los misterios que encierran sus páginas, nos lleva a pensar mucho más lejos de lo que podríamos.

Para terminar, les diré que recomiendo este libro a todas las personas que ya hayan leído por lo menos uno de los previos ya que, sin lugar a dudas, necesitan de un criterio más amplio para aprieciar lo que tienen entre sus manos. Pero fuera de eso, es un libro ALTAMENTE RECOMENDABLE, por no decir casi necesario en la biblioteca personal de cada uno. Sin duda, uno de mis favoritos y creo que, de todos los que han venido y vendrán este mes, el que puedo decir que DEBE convertirse en un clásico.



El símbolo perdido


Autor (es): Dan Brown.
ISMB:  9788408089254
Género: Thriller, suspenso.
Editorial: Planeta.
Número de páginas: 608 páginas
Saga: 3/4. 
Sinopsis:  ¿Existe un secreto tan poderoso que, de salir a la luz, sea capaz de cambiar el mundo? Washington. El experto en simbología Robert Langdon es convocado inesperadamente por Peter Solomon, masón, filántropo y su antiguo mentor, para dar una conferencia en el Capitolio. Pero el secuestro de Peter y el hallazgo de una mano tatuada con cinco enigmáticos símbolos cambian drásticamente el curso de los acontecimientos. Atrapado entre las exigencias de una mente perturbada y la investigación oficial, Langdon se ve inmerso en un mundo clandestino de secretos masónicos, historia oculta y escenarios nunca antes vistos, que parecen arrastrarlo hacia una sencilla pero inconcebible verdad.

Opinión personal: Llegamos a la tercera entrega de esta gran saga y, lo cierto, es que no tengo buenas noticias para nadie. Les explicaré por qué.

El día de ayer les comentaba que la figura de Robert Langdon comenzó a caer en cierta monotonía, en una fortaleza huama irreal que le quitava vivacidad en comparación con otros personajes. Bueno, esta es la entrega que echa todo a perder. Ni más ni menos. Langdon ha pasado por mucho para la fecha en que se situa este libro, lo peor del asunto es que el autor no ha pasado por alto los acontecimientos anteriores, a veces incluso hace referencias a ellos; y sin embargo Robert lo supera todo y más. Llegados a este punto parece que está acostumbrado a que le apunten con un arma directo a la cara, es como si fuera el pan de cada día para el héroe de ese libro que, ahora, es un héroe completo al estilo Clark Kent, o cerca. Terriblemente cerca.

Desde luego no puedo quejarme de las ilustaciones que nos marca el autor. Una vez más sorprende con su forma detallada de relatar cosas tales como monumentos, pinturas, paisajes, lugares y todo a lo que ya estamos acostumbrados. Para eso, Brown sigue siendo un maestro y en esta entrega no es la excepción.

Sin embargo, me parece un tanto que este libro daba para más. Eran los MASONES. A secas. Era su elemento, su lugar de origen, una leyenda que debía conocer de antemano y, a pesar de eso, me parece que se ha quedado corto en la emoción que debió imprimirle a las escenas, a los diálogos. A todo en general. No es que no me haya gustado en si, que sea un mal libro en toda regla ni mucho menos. Quizá solo era que intenté a cada paso buscarle a Langdon una humanidad que había perdido y no pude concentrame del todo en la trama. El punto es que al final del día "El símbolo perdido" me pasó sin pena ni gloria. Como decimos en México, sin chiste. Recuerdo pocos detalles de esta lectura y lo cierto es que hago esta reseña con el único fin de dar mi opinión al respecto y completar lo que podríamos decir que es la saga de Robert Langdon.

Sinceramente, de ser posible, si no son tan obsesivos como yo, recomiendo que salten este libro y sigan adelante.




Deadpool

Como era de esperarse y sin tardanza, el día de hoy fui a ver Deadpool. Lo cierto es que tenía altísimas espectativas de esta película y no me quedó a deber para nada. 

Para los que no lo conocen, este anti-héroe del mundo Marvel ha sido llevado a la pantalla grande por Ryan Raynolds. En este punto he de admitir que dudaba que ese hombre hiciera un buen papel pero, también, he de reconocer que me equivocaba. 

A grandes y gloriosos rasgos la película fue buenísima. Divertida, irreverente, con un personaje principal que le habla al espectador, con palabrotas, dibujos tontos y mucha diversión; me parece que es uno de los largometrajes mejor logrados de la franquicia. Incluso los detalles pequeños fueron buenos. No tenemos un Deadpool con la boca cocida, aunque hacen una buenísima y divertida referencia a eso, y al hecho de que su papel en Wolverine Origenes no fue como debería de bueno. Otra cosa que me gustó mucho fue que Coloso al fin era ruso. Como lo leen. ¡Ruso! Con acento y todo. 

Claro que también hubieron otros factores que hicieron de esta una buena película. Para empezar el hecho de que Stan Lee le haya dado el visto bueno con su particular forma de aprovar las películas, haciendo su genial aparición. La fotografía de la película fue muuuuy buena. Completamente visible, con efectos donde debía tenerlos. El maquillaje y, sin duda, el vestuario con ese casi idéntico traje a como todos sentimos que debía ser. Las escenas en cámara lenta fueron increíbles y le dieron cierto toque que me parece que fue esencial en el ritmo del film.

Sin duda, estos y muchos más fueron los detalles que hicieron de Deadpool una película necesaria de ver. No sólo recomendable, sino necesaria. Y, por supuesto, el divertido lenguaje que todos conocemos mezclado con bromas locales sobre los productores, actores y demás personas que participaron en la historia o, yendo un poco más lejos, en esos chistes locales sobre las otras películas que hizo el actor. Sin duda ya todos lo hemos visto en el trailer su alución a Green Lantern. Aclaro, y esto es un punto importante que, si no eres realmente fan, muchos de estos chisten no te harán gracia. Tristemente en muchos de esos momentos la sala estaba en completo silencio exceptuando a mis amigos y yo, que si entendíamos de lo que iba la broma.

Eso si, y aclaro. La versión mexicana SI fue cortada. Cuatro minutos de la escena sexual donde Wade conoce a la chica de sus sueños (justo para el 14) tiene algun tiempo menos para nosotros en esta entrega. 

Por lo demás me parece que fue una adaptación MUY BIEN lograda. Con un mensaje buenísimo detrás de todo, un lenguaje estúpido que a todos nos gusta, una fotografía que te lleva realmente a donde debes ir y una trama que te hará pedir más. Altamente recomendable para los mayores de 15 años y todos aquellos colados que sean capaces de hacerse con un boleto. Nadie debería perdérsela.

A todos ustedes, saludos y chimichanga.







El Código DaVinci

Autor (es): Dan Brown.
ISMB:  9788495618603.
Género: Thriller, suspenso.
Editorial: Umbriel.
Número de páginas: 536 páginas.
Saga: 2/4.
Sinopsis: Robert Langdon, experto en simbología, recibe una llamada en mitad de la noche: el conservador del museo del Louvre ha sido asesinado en extrañas circunstancias, y junto a su cadáver ha aparecido un desconcertante mensaje cifrado. Al profundizar en la investigación, Langdom descubre que las pistas conducen a las obras de Leonardo Da Vinci… y que están a la vista de todos, ocultas por el ingenio del pintor. Langdon une esfuerzos con la criptóloga francesa Sophie Neveu y descubre que el conservador del museo pertenecía al Priorato de Sión, una sociedad que a lo largo de los siglos ha contado con miembros tan destacados como Sir Isaac Newton, Botticelli, Victor Hugo o el propio Da Vinci, y que ha velado por mantener en secreto una sorprendente verdad histórica. Una mezcla trepidante de aventuras, intrigas vaticanas, simbología y enigmas cifrados que provocó una extraordinaria polémica al poner en duda algunos de los dogmas sobre los que se asienta la iglesia católica.

Opinión personal: Dejando de lado los sentimentalismos, creo que es necesario entrar directo en lo que debemos.

Siendo sinceros, me parece que es en este libro donde comenzamos a ver un poco de monotonía por parte del personaje principal. Descubrimos que es mucho más fuerte de lo esperado, que a por momentos se enfrenta a sus miedos con tanto empeño que nos hace sentir que se está convirtiendo lentamente en un super héroe. Eso no me agradó demasiado porque el autor le quita un poco de credibilidad, además de humanidad, a Langdon. Pero, fuera de eso, me parece que el personaje está tan bien desarrollado como siempre, con esas características que lo hacen particularmente llamativo. Mi único problema radica en que sigue tienendo problemas con mujeres, no con la misma, pero si esos ligeros traumas con las relaciones femeninas. Por si fuera poco, la única débilidad que podría decir que lo hace medianamente humano es su siempre presente claustrofobia. En pocas palabras, no existe una evolución muy notoria, pero no por eso el libro deja de valer la pena.
Ahora bien, hablando de la trama, nuevamente, Brown nos sorprende con un thriller que nos mantiene al borde del asiento todo el tiempo. Y por todo me refiero a TODO el tiempo. Con una trama maravillosamente bien creada, hace gala de su mente brillante y su ser conspiranóico que esta vez nos lleva por Francia en la búsqueda del Cáliz de Cristo. Así de sencillo y fácil.

Lo cierto es que nuevamente nos sorprende con teorías increíbles basadas en datos históricamente reales, con personajes secundarios que ayudan genialmente a la trama y el avance de la historia. Volvemos a desarrollar una noche y poco más en todas esas páginas, lo que nos garantiza descripciones detalladas de obras de arte, lugares y sensaciones, además de unos cuantos flashbacks de varios personajes. A este respecto no tengo mucho que decir, el paisaje que nos pinta Brown es tan rico como en su entrega anterior y nos hace disfrutar a cada segundo de la lectura, llevándonos a ese punto del globo donde nos quiere tener. Sin lugar a dudas su manera de escribir nos hace viajar. Eso es algo que puedo garantizar.

Ya para acabar con esta corta reseña, me parece que el final, nuevamente, es inesperado, al grado de que, al leerlo, nos quedamos de una pieza por la pura impresión. Por si fuera poco, y esto es algo que debo mencionar, nos regala un epílogo épico que, al menos a mi, cuando lo leo nuevamente, me vuelve a poner la piel de gallina.
Recomendado para todo el público que desee un reto mental de los grandes, con misterio, suspenso, algo de miedo (quizá un tanto infundado de mi parte) y todo lo bueno que Dan Brown nos deja ver en cada página. Sin duda, un libro que dejará huella en el intelecto de todas las personas, un reto literario que nadie debería perderse.



Ángeles y demonios


Autor (es):
Dan Brown.
ISMB:  978-84-92516-51-3.
Género: Thriller, suspenso.
Editorial: books4pocket/Narrativa.
Número de páginas: 725 páginas (pocketbook).
Saga: 1/4.
Sinopsis:  Robert Langdon, protagonista de El Código da Vinci, se enfrenta en esta ocasión a un oascuro complot que pretende destruir la Iglesia católica... literalmente. Los Iluminati, una organización que data de los tiempos de Galileeo, ha regresado y se ha apoderado de un arma de un poder inimaginable. Para detenerlos, Langdon tiene que descifrar las claves ocultas en iglesias y monumentos de toda Roma antes de que sea demasiado tarde, con ayuda de una intrépida científica y de un capitán de la Guardia Suiza. En los rincones más secretos del Vaticano se desarrolla una trama trepidante, llena de acción y suspense en la que se revelan algunos de los más oscuros enigmas de la historia.


Oponión personal: Primero que nada, aclararé que esta saga, por llamarla de alguna forma, es de mis favoritas, y si bien no todos los libros que la conforman son de mi agrado, al menos quiero darles mi opinión personal sobre algo que, a mi ver, todo el mundo debería leer aunque fuera una vez en la vida.

Ahora bien, entrando de lleno en lo que debemos y siendo concretos con este libro, la primera entrega de Brown donde podemos observar a un Robert Langdon como protagonista, ya con una forma de ser más definida y todo esos asuntos, es este, sin duda. Refiriéndonos a la trama me parece que fue un acierto total. Para su época fue toda una bomba que casuó, incluso, problemas con la iglesia. Creo que para todos aquellos conspiranóicos este libro es completamente lo que buscan. ¿Se imaginan un mundo donde los Iluminati vuelven a la vida con la única idea de terminar lo que comenzaron, su lucha eterna contra la iglesia? Como ya dije, la trama es una maravilla que te mantiene al filo del asiento página tras página. Con una narrativa ligera, de capítulos cortos, el libro se digiere sencillamente a pesar de los muchos términos complicados que maneja. Tiene una trama fácil de seguir pero, no por eso, sencilla de descifrar. Y, por si fuera poco, Brown posee un maravilloso sentido del misterio que nos estresa a cada paso mientras intentamos adelantarnos un poco a su razonamiento.

Si de personajes hablamos, me parece que el libro esta muy bien logrado. Desde el personaje principal, con su claustrofobia que se hará presente durante toda la saga, hasta nuestro villano actual; todos los personajes son impactantes y profundos a su manera, con un trasfondo poco común en la literatura. A mi ver, son personajes fuertes por sus debilidades y por la forma en que el autor los humaiza. No tenemos super héroes, nada de fuerzas sobre humanas ni rayos láser saliendo de los ojos. Simples y sencillas personas que nos hacen ver que un cerebro brillante a veces es mejor que muchas cosas. Enfocándonos en Langdon como protagonista, a mi parecer es buenísimo en general. Desde esos detalles y particularidades que tiene en la forma de vestir hasta su forma de pensar, Robert Langdon es y siempre será un profesor de universidad en toda regla.

En una reseña anterior, en otro blog, había mencionado lo siguiente pero me parece algo necesario. Es sumamente difícil describir algo que todo el mundo conoce porque cada persona tiene una perspectiva diferente de esos objetos, más aún si se trata de arte, pinturas, esculturas, etc..., pero Dan Brown hace lo imposible y más trazándonos ante los ojos cada obra de arte de la que habla de una forma tan personal que la sentimos más como un punto de vista al respecto que como una descripción y, por si fuera poco, al mismo tiempo tiene la magia de detallarnos cada obra como lo haría un objetivo profesor de arte, de una manera tan casi impersonal que nos mete aún más en la historia. En aquel momento no tenía mucha idea de cómo explicar esto, y creo que sigo sin tenerla en lo más mínimo, pero espero que me hayan entendido un poco de la idea de lo que quiero expresar.

Yendo por esa misma idea nos topamos con los paisajes, mismos en los que Brown nos hace caminar paso a paso de la mano de nuestro protagonista. No hay mucho más que tenga que decir al respecto. El autor nos describe obras de arte de una buenísima manera, sería muy extraño que tuviera un error al trazar el paisaje.

Ya para terminar hablaré, irónicamente, del final. A mi parecer, en lo que respecta a este libro, tuvo todo y más de lo deseado. Un villano con problemas mentales y sin un por qué para su maldad (claro que su por qué tiene una profundidad de la que no puedo hablar sin dar spoilers), con un giro inesperado que te roba el aliento. En general, la primera entrega de Dan Brown es tan buena que las calaveritas son totalmente merecidas, pero, como no puedo tener mucha objetividad con este autor me retiraré diciendo esto: quien aprecie y conozca mi gusto por los libros se dará cuenta a primera vista que este no es uno que puedan dejar pasar.




Mockingjay

Autor (es): Suzanne Collins.
ISMB:  9786074001907
Género: Aventura, futurista, ciencia ficción.
Editorial: Oceano.
Número de páginas: 228 páginas.
Saga: 3/3.
Sinopsis: Katniss Everdeen, ha sobrevivido de nuevo a LOS JUEGOS, aunque no queda nada de su hogar. Gale ha escapado. Su familia está a salvo. El Capitolio ha capturado a Peeta. El Distrito 13 existe de verdad. Hay rebeldes. Hay nuevos líderes. Están en plena revolución. El plan de rescate para sacar a Katniss de la arena del cruel e inquietante Vasallaje de los Veinticinco no fue casual, como tampoco lo fue que llevara tiempo formando parte de la revolución sin saberlo. El Distrito 13 ha surgido de entre las sombras y quiere acabar con el Capitolio. Al parecer, todos han tenido algo que ver en el meticuloso plan..., todos menos Katniss.

Opinión personal: El día de hoy venimos a traerles la última entrega de esta saga que, esperamos, hasta el momento les haya gustado mucho.

Bien, entrando en el tema desde el momento hablemos de la trama, como siempre. Quiero hablar de esto más que nada porque me sorprendió enormemente cuando lo leí por primera vez. Ya sabíamos todos que Katniss era humana, pero verla quebrarse en pequeños pesazos ante nuestros ojos creo que fue el acierto más grande para un libro. Cientos de veces he visto como los personajes se vuelven irreales enfrentándose a situaciones imposibles y saliendo indemnes. Eso no ocurre en esta entrega, lo cual se agradece. Por si fuera poco, el resto de los personajes tienen el mismo cambio, se enfrentan a la nueva vida destruida lo mejor que pueden, lo que hace de la historia algo vívido.

Claro que también existen momentos de alegría, lo que le da cierto sabor que no habría obtenido el libro de otra manera.

Respecto a los personajes, me parece que ya he hablado de su maravillosa evolución, de sus geniales cambios, de sus evoluciones con respecto a carácter y, en esta entrega, también debo hablar de los cambios físicos, de los que nos habla Collins varias veces, sobre todo los que ocurren respecto a las heridas que les causan a los protagonistas y sus amigos. Eso en particular me gustó mucho.
El párrafo anterior me recordó algo, una cosa que me gustó mucho también. Las muertes. Sin duda este libro está lleno de muertes entrañables que hacen de este un libro para nunca olvidar. Sin duda estas muertes junto con toda la traición que hubo tras ciertos actos, toda esa trama política, hicieron del libro algo que nos hizo pensar.

Además, Suzanne Collins no dejó de darnos lecciones de vida, de hacernos pensar sobre nuestro futuro como raza humana. Eso, me parece, es con lo que yo me quedo de este libro.

Para terminar, haré patente lo que en realidad odié del libro, y para eso intentaré no dar muchos spoilers pero no garantizo nada. Bien, me parece que el final fue MUY forzado. Ni más ni menos. De pronto (sé que se supone pasaron muchos años pero a mi no me suena lógico) la vida de Katniss comenzó a mejorar, aun a pesar de todos esos traumas. Por si fuera poco, determinadas personas se fueron de su vida para que otras ocuparan el lugar estelar. Creo que eso, más que otra cosa, me pareció obligado y molesto. Al menos a mi, personalmente, me parece que ella debió quedar sola, completamente sola excepto por Haymitch quien tenía tantos problemas como ella misma; y que sólo diera precedente de que los Juegos habían terminado. Me parece que ese casi cuento de hadas que le dieron al final estuvo de más. Pero bueno... Concluiré diciendo que es una saga ESTUPENDA que sin duda, independientemente de si las películas les gustaron o las odiaron (como yo), promete quedarse como clásico.

Un libro para todas las edades, para degustar y analizar, pensar sobre el futuro y volver sobre nuestros pasos. Es una saga que, a mi ver, nadie debería perderse.