R.I.P.D. City of the damned


Hola a todos. Yo de nuevo por acá con una nueva reseña sobre un cómic, claro que si. 

El día de hoy me di a la tarea de leer la "segunda parte" del título R.I.P.D, conocido en español como La policía del más allá. Este spin off en particular está dividido nuevamente en cuatro tomos, lo mismo que la anterior que les dejo por acá R.I.P.D, y fue distribuida por Dark Horse Comics hacia el 2012. Cuenta con los protagonistas de la entrega anterior, pertenecientes a Peter M. Lenkov aunque ahora la historia corre de mano de Jeremy Barlow con ilustraciones de Tony Parker. Hasta aquí, todo normal.

Imaginemos pues que nuestro nombre es Roy Pulsipher y que nos acaban de asesinar cobardemente, con tres disparos a la espalda. No sabemos qué pasa ni mucho menos, todo lo que entendemos es que nos estamos muriendo -ya estamos muertos- en mitad del desierto y que un par de tipos vestido de caballero medieval y samurai se acercan a nosotros para ofrecernos un trato. ¿Qué tipo de trato? El mejor que nos podrían dar. Como US Marshall, o somos ajenos a las armas, así que sólo se encargan de ampliar nuestra jurisdicción. Ahora, en lugar de servir al estado o la nación, servimos a Dios. Y para lograr nuestro cometido nos ponen de compañero al tipo medieval que fue a recogernos. Su nombre es Crispín y, aunque al inicio no conectamos por completo, al menos nos toleramos. Como primera misión, por si fuera poco, nos dan la posibilidad de saber más sobre nuestra muerte y a la par resolver un crimen. Alguien ha estado desapareciendo y cazando almas pero, ¿por qué?

Esta es, ni más ni menos la primicia con que R.I.P.D City of the damned llega a nosotros. Ahora, vayamos por partes para ver qué tan bien nos va en este cómic.

Lo primero de lo que hablaré es de la ilustración. Se trata, y no por comparar sino para usar como punto de referencia, de un dibujo mucho más "maduro" que el anterior. Los personajes y su entorno no están completamente caricaturizados como en la saga anterior. Estos tienen rasgos humanos y sus portadas aspiran al realismo más que a la diversión. No me parece mala idea ni mucho menos, tampoco que se salga por completo del plan. Así mismo, tampoco siento que le dé más seriedad a esta entrega si se compara con la anterior. Creo que la temática va por el mismo sentido y eso ayuda a que nos centremos en lo que debemos. Eso sí, las ilustraciones de portada son hermosas y me parece un trabajo excelentemente bien hecho.

Sobre la trama, me parece que la idea principal se queda, cosa que agradezco. Además, a muchos de nosotros la primera entrega de R.I.P.D nos dejó con la intriga de conocer el origen de Roy y aquí lo tenemos. Es un agregado en toda regla, una precuela bien trazada que, por si fuera poco, se une entre sí debido a los personajes anteriores ya que comienza en el mismo con Nick y Roy en misión. 

Respecto a los personajes, he de reconocer que me gustaron bastante. Roy es ese hombre que no se deja de nadie, que responde a todo con sarcasmo e ironía. Eso se mantiene en esta entrega. Un hombre inteligente de respuestas fáciles que jamás dejará que nadie le pase por encima. Se agradece que mantuvieran la esencia del personaje. Por si fuera poco, su coprotagonista no es igual a Nick. Puede parecer poco pero sería molesto toparnos con otro más como Cruz a lo largo de la saga y darnos cuenta que su relación y su dinámica son exactamente las mismas. No es el caso. Se trata de un ser un poco más humano, alguien que tienen mente propia y que por eso puede ser peligroso, incluso para Roy. Sin embargo, puede ser por esto que la relación entre ellos dos no me pareció tan estrecha como la de Nick con Roy. No digo que sea malo, sino que su fraternidad es poco y, pese a eso, se tienen suficiente lealtad como para que las cosas terminen de la manera en que lo hicieron.

Hablando sobre el final, he de decir que eso sí no me gustó para nada. Fue una cosa completamente esperada y predecible. La imagen final fue obvia desde que derrotaron al villano. No me parece particularmente malo, sólo que esperaba un giro distinto, algo menos visual en cierto punto del cómic. 

No me malentiendan. Claro que me gustó el cómic, claro que lo mantendré en mis filas y que, de toparme con más entregas al respecto, los comparé sin dudarlo. Es una saga que vale mucho la pena y me encantó desde el primer momento en que vi la película. Es por eso que se la recomiendo a todos los adolescentes mayores de 15 años debido a que cuenta con muchas ideas existencialistas que los chicos más jóvenes no van a entender. Eso sí, si tienes 12 años y no tuviste que googlear la palabra existencialismo, estás listo para leerlo. Por lo demás, lo recomiendo a todo el mundo que quiera una gran, magnífica, divertida e increíble aventura en corto tiempo.

Saludos enormes,



Basketful of heads


¡Mis queridos seres míticos! Yo de nuevo por acá con una nueva reseña. En un intento de ponerme al día con todos ustedes, me he dado a la tarea de procurar apurarme con las lecturas y, lo que es más, también compré algunos cómics para variar toda la situación y no enfrascarnos en los libros. Así que vengo a traerles la reseña de mi más reciente
adquisición: Basketful of heads, o en español Canasta llena de cabezas. Dentro de la ficha técnica contamos con un dato sumamente importante: este es el primer cómic publicado oficialmente por Hill House Comics que, para quien no los conocen, fue fundada por Joe Hill en persona, autor de otros títulos tales como Locke and key. Pese a eso, también puedo decir, por ejemplo, que es el autor de Hornes (libro que estoy por adquirir y reseñar. Pero volviendo a el tema que nos interesa, este cómic fue publicado por primera vez en octubre del 2019 y terminó en mayo de 2020. Y ya para finalizar la ficha técnica, cuenta con la ilustración de un hombre que se hace llamar Leomacs. Hasta aquí todo relativamente normal.

Imaginemos, pues, que somos una chica, una estudiante de Psicología, que vivimos en un pequeño poblado del norte de Estados Unidos llamado Brody, que cuenta con una isla llamada Isla de Brody, en Maine. Tenemos un novio llamado Liam Elsworth (Liam Hemsworth qué) quien ha trabajado todo el verano como policía, uno simple y sencillo que, al ser novato, se dedicó a dar infracciones viales. Entonces, un día, el pueblo entero se descontrola porque cuatro reos escaparon de una prisión. A nuestro novio le toca cuidar la casa del sheriff y nosotros nos quedamos a ayudarlo... hasta que los cuatro reos aparecen y tenemos que defendernos. Todo lo que tenemos a la mano es un hacha que, cuando la usamos... deja las cabezas vivas...

Si esta
premisa no los hace quedarse hasta el final de la reseña, en realidad, no sé qué sí podría. Pero bueno, es momento de comenzar con las formalidades y creo que lo haré con los personajes, antes de que lo olvide. June, la protagonista, me parece uno de los personajes más humanos de toda la trama. Se trata de una mujer joven e independiente, brillante y valiente. Da todo por aquellos que ama y a quienes considera relevantes pero también tiene un alto sentido de la justicia. En este punto debo aclarar que se trata de una chica que no sólo sabe ver los errores de los demás, sino también los propios y los de aquellos a quienes ama, cosa que me parece particular porque pocos podemos lograr una realización a este grado. Por otro lado, también se trata de una chica como cualquier otra, una que tarde o temprano tendrá su quiebre, que gritará de rabia, miedo e impotencia, de no saber si está perdiendo la razón o sus acciones son las correctas. 

Claro que, para que ella luzca, es sumamente necesario que el resto de los personajes valgan la pena. En términos generales, los "villanos" son bastante humanos. No se trata de estos seres monstruosos que quieren la dominación y destrucción de la tierra. Sólo son personas egoístas que ven por su propio bien, por su avance personal sin tomar en cuenta el hecho de perjudicar a otros en el camino. Intentan hacer las cosas de forma impersonal porque, de ponerle cara a sus víctimas, tienen corazones frágiles y vulnerables que los harán cambiar de opinión y, de hacerlo, eso les costaría mucho dinero. Por otro lado, el novio de June, Liam, es también muy humano. Tiene las debilidades básicas de cualquier persona, lo mismo que las virtudes. Puede cometer errores como el resto del mundo y eso no lo hace más o menos persona que nadie.

Respecto a los gráficos, he de decir que me han encantado. Se nota el empeño que pusieron para realizarlos, además de darles un estilo particular. Tiene mucho de los detalles difusos que hay por momentos en los cómics pero, al mismo tiempo, tiene un sello particular. Por si esto fuera poco, cuenta con escenas a una hoja entera que valen muchísimo la pena ver, además de secuencias de acción que captan los momentos a la perfección. Me parece que se trata de un acierto por donde sea que se le mire.

También siento que necesito destacar mucho el trabajo que se hizo con los diálogos. Si bien hay chistes que pueden parecer muy básicos al lector, todos ellos sobre cabezas, la realidad es que dentro de todo el contexto dan risa. Además de que el lenguaje es sumamente sencillo. Lo único que tengo que poner como contra en esto es que todos los personajes hablaban igual, sin embargo, lo atribuyo completamente a la traducción debido a que no lo leí en su idioma original. 

Otra de las cosas que tengo que aclarar es la restricción de edad. En la contraportada de mi edición dice que puede ser +13 pero, a mi ver, cuenta con muchas referencias sexuales, muchas groserías subidas de nivel -y miren que yo tengo boca de camionero ebrio- y mucha, pero mucha gloriosa sangre. Yo, sinceramente, subiría la restricción por lo menos a los 17 años y con chicos de criterio amplio. Fuera de eso, recomiendo este cómic ampliamente. Me divertí muchísimo leyéndolo. Me encantó de inicio a fin, pero sobre todo ese giro inesperado del último tomo que le da a toda la historieta una suerte de ironía trágica que da un maravilloso sabor de boca al terminar con él.

Saludos enormes,



Vincent and Theo. The Van Gogh brothers


Autor (es):
Deborah Heiligman 
ISMB: 978-080-509-3391
Género: Biografía
Editorial: Henry Holt
Número de páginas: 454 páginas
Saga: No la necesita
Sinopsis:The deep and enduring friendship between Vincent and Theo Van Gogh shaped both brothers' lives. Confidant, champion, sympathizer, friend--Theo supported Vincent as he struggled to find his path in life. They shared everything, swapping stories of lovers and friends, successes and disappointments, dreams and ambitions. Meticulously researched, drawing on the 658 letters Vincent wrote to Theo during his lifetime, Deborah Heiligman weaves a tale of two lives intertwined and the extraordinary love of the Van Gogh brothers.


Mis queridos seres míticos. Luego de todo este tiempo con esta edición en el librero, por fin tuve la paciencia, el tiempo y la valentía de leerlo. Creo que muchos de ustedes lo vieron en mis distintos post de Instagram, sobre todo, sin embargo, no fue hasta este momento que lo he leído y terminado. De manera que vengo a ustedes con esta misiva -porque así siento esta entrega-, para decirles de qué va el libro. Y quiero que tengan en mente sólo una cosa: "El mundo no hubiera tenido a Vincent sin Theo".

Más allá de hacer de esta una reseña regular donde hable de "la trama" o "los personajes, creo que les hablaré de mi experiencia leyéndolo debido a que se trata más bien de un libro bibliográfico. Aquí no hay personajes, sólo un grupo de personas que coincidieron en tiempo y espacio. No hay trama, sólo la vida de mentes torturadas y almas que se unieron para dar vida a cosas que dejaron una marca impensable en la historia. De manera que, aquí va la carta de recomendación para ustedes.

De manera física les puedo decir que el libro es hermoso. Se nota que hicieron un gran y arduo trabajo en la edición. Se esmeraron por hacer sentir al lector que las cosas no sólo eran con letras, sino también visuales. En cada una de las "galerías" aparecen imágenes de los dibujos de Vincent, cosa que se agradece muchísimo de entrada. Además, cuenta con unas hojas gruesas y satinadas cerca de los tres cuartos del libro donde se muestran las pinturas más emblemáticas del pintor. Es necesario que les mencione que deben tenerlas a la mano pues muchas de ellas se describen dentro del libro debido a que fueron relevantes dentro de la historia misma de Vincent. Además de esto, la autora juega con estilos literarios y visuales. Hay páginas que tienen un significado enorme a veces por lo que no contienen. Da ese énfasis que se necesita y uno como espectador no sólo lee sobre el tema, lo siente... lo ve

A este respecto tengo que hablar mucho de ello. Se trata de un libro sumamente visual. La autora describe las pinturas de Vincent e intenta relacionarlas con lo que sabe de sus estados de ánimo dependiendo de sus cartas enviadas a distintas personas a lo largo y ancho de Europa. Ya fueran amigos o familiares, colegas artistas, Vincent procuró nunca guardarse nada y, lo que no podía expresar con palabras, lo expresaba con pintura. Esto hace el libro muy bello, incluso en su narrativa. 

 Vincent feels Theo next to him. 
 Almost drained of life, 
 he is transported back to their 
 childhood in the Netherlands, 
 to their small town, to a time he 
 remembers as simple and pure and 
 beautiful, a time when the two brothers 
 shared an attic room, a life, a future.

Deborah Heiligman, Vincent and Theo. The Van Gogh brothers
Henry Holt, New York, 2017, pp. 11-12.

Otra cosa que me encantó es el apéndice que aparece al final con todas las referencias a las cartas. La autora, pese a hacer un libro bastante romántico, se basa en hechos completamente reales y documentados. Su trabajo de investigación es titánico, además de que se empeña en dejar de lado esos mitos sobre Vincent y algunos de sus accidentes. Da todas las versiones posibles y deja que el lector se quede con la que mejor le parezca. Esto se agradece porque intenta ser objetiva, no quedarse con los rumores, darnos "la paleta completa". Es maravillosa la forma como transmite los términos pictóricos a la literatura. Hablando de eso, también es increíble la relación de los mismos. Por ejemplo, de Vincent suele hacer retratos. Estas imágenes completas de su persona dependiendo de la edad o momento de su vida. Sin embargo, de Theo hace croquis debido a que se cuenta con mucha menos información al respecto. Del segundo varón de los Van Gogh sólo da los datos con los que cuenta y, sinceramente, son bastante precarios porque el ojo público siempre estuvo en Vincent. 

 Question: did everyone who saw them - 
 heath, grass, land, fields, woods - 
 also love them, and the snow and the rain 
 and the storm? 

Ibid., p. 24.

Es necesario que hable, como tal, de los hermanos. De su relación. Me parece que la autora se empeñó en demostrar el lazo que compartían y lo logró con creces. Además, intentó rastrear también la perspectiva de Theo porque, al final del día, el libro se titula con el nombre de ambos. Esto me parece un giro inesperado para una historia ya conocida. Todos sabemos de Vincent Van Gogh, pero pocos sabemos todo lo que su hermano hizo para que él llegar a ser quien era. Me gustó la manera en que describe el esfuerzo, cada paso de ambos -en la medida de lo posible-, cada sitio al que fueron y cómo es que su vida se desarrolló juntos y por separado. Hace de su hermandad algo todavía más grande, la muestra de una manera que parece casi irreal. 

 Distance can change perspective, too. 
 So can time.

Ibid., p. 171.

Por último, creo que debo reconocer el esfuerzo que hizo por documentar toda la situación. Me refiero a que el libro -como la vida- no para cuando muere Vincent. El libro se llama "Vincent y Theo", y sigue con la historia luego de eso. Por si fuera poco... la autora nos dice qué pasó luego. Nos cuenta cómo Jo, la viuda de Theo, hizo hasta lo imposible por continuar el trabajo de su esposo y dio a conocer a Vincent. Es de agradecerse que la autora le diera el reconocimiento también a quienes engrandecieron y dieron a conocer la figura del pintor. Hablando del tema, también menciona qué fue del pequeño Vincent y cómo formó parte de la construcción del ahora Museo de Vincent Van Gogh en Amsterdam. Como se puede notar, no existiría Vincent sin Theo... pero tampoco sin Jo. 

Ya para terminar, le recomiendo este libro a todos... Si sabes leer y sabes quién fue Vincent Van Gogh, si te inspira y no temes leer sobre la vida real, este libro es para ti. 

Saludos enormes,

Vera historia del tío Sam


Autor (es):
Eduardo del Río (Rius)
ISMB: 978-968-5592-49-9
Género: Caricatura política
Editorial: Parcifal
Número de páginas: 116 páginas
Saga: Algo así
Sinopsis: Desde el inicio del tiempo, el tío Sam se ha hecho de nombre. Apenas llegó la conquista, a la que entraron tarde, no se hicieron del rogar para demandar su pedazo del pastel. Y, claro que sí, las batallas ajenas y su constante venta de armas para guerras que ellos mismos provocan, son la fuente de su éxito total.


Hola a todos. Yo de nuevo por acá, siento tan rápida como el viento y Tiro al Blanco juntos. Además, aprovecho mis vacaciones para, claro que sí, venir a dejarles una nueva reseña antes de que acabe el año. El día de hoy, como ya bien lo pudieron observar en la ficha técnica, le toca al glorioso, al Dios de dioses: Eduardo del Río, aunque entre sus amigos lo conocemos como Rius. Que, para los que no lo conozcan y quieran saber más de él, les dejo por acá el link de otra de mis reseñas de este autor (La revolucioncita mexicana) y esperen pronto más reseñas al respecto. Como sea, comencemos con esta.

A grandes rasgos les diré de qué va la situación. Básicamente, Rius se encarga de hacer libros enteros contando historias documentadas sobre perspectivas erróneas que tenemos de la historia en general. De ahí la grandeza de sus libros. Y, claro, no se me vaya a olvidar, también porque con frecuencia se burla de las cosas. Ni más ni menos. Todo aquello que esté mal, a ojos de Rius, es risible. Para muestra, todos sus dibujos.

 Indios dueños de todo, 
 pero hoy criados de todo... 

Eduardo del Río (Rius), Vera historia del tío Sam
Parcifal, Ciudad de México, 2007, p. 17.

Respecto a la "técnica" creo que no tengo demasiado qué decir. Sus dibujos cumplen el objetivo que es ridiculizar a la persona de la que se habla. En este caso, darle una personalidad física al "tío Sam" y exponenciarlo hasta la estulticia (una grosería culta. Tomen nota). No se trata de dibujos bellos ni mucho menos, son bastante básicos y se nota que todos los hizo a mano alzada, lo que nos acerca más al cartón político que se publicó en los periódicos y que muchos de ellos todavía mantienen. Además, entrecomillo lo de técnica porque creo que cada artista es distinto y cada uno de ellos puede imprimir a sus dibujos lo que vea necesario para darle un ser único y llamar la atención. 

 ¿Cómo vas a ser americano si no 
 hablas inglés, ni eres blanco 
 ni vistes como la gente?

Ibid., p. 27.

Sobre la temática, la realidad es que leer a Rius siempre es un placer en ese sentido. Nos hace ver las cosas desde una perspectiva más cruda y cínica, más apegada a la realidad que muchas veces se nos quiere ocultar con la finalidad de que las cosas sigan siendo como hasta el momento. Así pues, se trata de un deleite en toda regla porque se vale de aspectos comprobables, entremezclando sus cartones con fotografías y pedazos de documentos reales. No sólo se trata de quejarse o burlarse sobre los temas que le molestan, sino de tener argumentos detrás que respalden su pensamiento.

 Igual que le tocó desplomarse 
 al imperio inglés, 
 hoy le toca su fin al imperio 
 del dólar... 

Ibid., p.88.

En términos generales, se trata de un libro demasiado corto pero lleno de información, que hará reír a más de cinco en grupos de cinco; que no sólo logra su cometido, sino que además nos hace pasar un buen rato mientras pensamos hasta dónde llegan las palabras de Eduardo del Río y cómo afectan nuestra vida en la actualidad. 

Ya para finalizar, sólo diré que se lo recomiendo a todos por encima de los 15 años. Si bien los más jóvenes no sabrán algunos eventos que se relatan en el libro, Rius se esfuerza por ponerlos en contexto y, con una buena búsqueda en Google, todo quedará más que en su sitio. Pero más que a nadie, se lo recomiendo a todos los inconformes, a los que no se están en paz con cualquier explicación, a los que piensan que siempre se puede hacer un extra. Y como siempre con estos libros, me despido de todos ustedes con un ¡QUÉ VIVA LA REVOLUCIÓN!

Saludos enormes,




Relato de un náufrago


Autor (es):
Luis Alejandro Velasco (comp. Gabriel García Márquez)
ISMB: 978-607-07-3120-4
Género: Crónica
Editorial: Diana
Número de páginas: 121 páginas
Saga: No la necesita
Sinopsis: "... le pedí a Luis Alejandro Velasco que me describiera la tormenta que ocasionó el desastre. Consiente de que la declaración valía su peso en oro, me replicó con una sonrisa: 'Es que no había tormenta'. La verdad, nunca publicada hasta entonces, era que la nave dio un bandazo por el viento en la mar gruesa, se soltó la carga mal estibada en cubierta, y los ocho marineros cayeron al mar. Esa revelación implicaba tres faltas enormes...".


Mis queridos seres míticos. Yo de nuevo por aquí para poder cerrar el año en paz, con más lecturas terminadas. El día de hoy les traigo un maravilloso libro de un conocidísimo autor colombiano, ganador del premio Nobel a la Literatura, ni más ni menos, que el amor de nuestras vidas, Gabo, también llamado Gabriel García Márquez. Así que, sin más, comencemos.

 Pensaba que a esa hora 
 alguien estaba mirando la Osa Mayor 
 en Cartagena, como yo la miraba en el mar, 
 y esa idea me hacía sentirme menos solo. 

Luis Alejando Velasco, Relato de un náufrago (compl. Gabriel García Márquez).
Diana, Ciudad de México, 2da ri., 2017, p. 41.

Es necesario que aclare algunas situaciones para que puedan, de lleno, meterse en la lectura. Este párrafo se lo pueden saltar los que sepan de qué va el libro y el porqué se escribió. Pues bien, se trata de la compilación de una crónica/relato que García Márquez escribió en 14 entregas para El Espectador, un periódico de Bogotá, Colombia, en el año de 1955. De manera que las personas y eventos aquí mencionados, en realidad ocurrieron. Pueden ir a Googlearlo, cosa que yo hice, y hay todo tipo de reseñas e incluso fotografías del marino en cuestión y sus amigos que cayeron al agua junto con él en ese momento. Hasta aquí, todo normal. Sin embargo, es necesario que mencione otro par de cosas. La primera es que el barco en el que iban, que era militar, llevaba contrabando de Estados Unidos. El segundo es que el gobierno de la época solía reprimir a la prensa y todo lo que tuviera que ver con evidenciar al gobierno. Así pues, en esas circunstancias, no sólo fue escrito este texto, sino que también fue publicado. 

 Siempre encontré un recurso para sobrevivir, 
 un punto de apoyo, 
 por insignificante que fuera, 
 para seguir esperando. 
 Pero al sexto día yo ya no esperaba nada. 
 Yo era un muerto en la balsa. 

Ibid., p. 67.

Bien, ¿de qué va la historia? Pues Luis Alejandro nos cuenta, en primera persona, los días de embarcación tras salir de Estados Unidos, los días navegando, sus diez días de naufragio y cómo fue que llegó a tierra y fue tratado por las personas. Para ilustrar la situación, que puede parecer poca en papel, en mi edición se adjunta un mapa con la ruta que siguió el barco, el punto exacto del accidente y el camino que siguió la balsa del náufrago hasta el punto donde por fin tocó tierra de nuevo. Hasta este punto la historia parece demasiado sencilla, entonces, ¿porqué este libro gusta tanto a las personas?

Uno de los principales motivos por el que Relato de un náufrago agrada tanto, es porque se narra de una manera rápida, cadenciosa y entendible. Su lenguaje es sencillo y puede hacer de un simple tiburón el ser más maravilloso del mundo. Además, claro está, por todo el trabajo periodístico que García Márquez hizo para poder lanzarlo al público. Por si fuera poco, también es relevante y la gente lo lee por el mero morbo de pensar en las consecuencias que pudo tener para el escritor colombiano y el marinero compatriota después de aparecer en el periódico. Sin embargo, aquí a mi me entraron un par de dudas al respecto que se ven reflejadas, principalmente, en qué tanto editó o escribió el mismo García Márquez. Según él afirma, Velasco era un gran narrador; pese a eso, siento que muchas de sus frases son demasiado rebuscadas, demasiado poéticas, para pertenecer a un ciudadano promedio de la clase trabajadora. Claro que eso no demerita en nada la historia y todo lo ocurrido, sólo que, a mis ojos, lo descarta hasta cierto punto de la idea de autobiografía. De cualquier manera, no deja de ser un libro maravilloso. 

 No sentía sed ni hambre. 
 No sentía nada, aparte de la indiferencia 
 general por la vida y la muerte. 
 Pensé que estaba muriendo. 
 Y esa idea me llenó de una 

Ibid., p. 89.

Respecto a los personajes no tengo nada qué decir debido a que es un testimonio. El "personaje" principal se nota auténtico y uno llega a empatizar con él porque, al final de cuentas, es completamente real. Respecto al resto, me agradó que hizo un intento por humanizarlos, por volverlos parte de nuestro entorno, de nosotros mismos y de todo lo que nos rodea y rodea la situación en que aparecen. Intentó volverlos personas y no sólo nombres sobre papel. Se agradece muchísimo.

Creo que es todo lo que tengo que decir del libro en sí porque lo que más me causa ruido viene en mis recomendaciones. ¿A quién se lo recomiendo? A todas las personas que quieran una gran aventura relatada de una bella manera. A los profesores que quieran darle a leer algo a sus alumnos, claro, no sin antes mencionarles toda la historia y empaparlos un poco de lo ocurrido. A las personas que entiendan el contexto histórico y encuentren el valor periodístico retratado en este escrito. En general, se lo recomiendo a quien quiera leerlo y saber un poco más de la vida de una persona que luchó hasta la muerte y de regreso por volver a tocar tierra firme.

Saludos enormes,


El viejo y el mar


Autor (es):
Ernest Hemingway
ISMB: 978-607-317-837-2
Género: Novela
Editorial: DeBolsillo
Número de páginas: 159 páginas
Saga: Nunca
Sinopsis: Santiago, un pescador anciano de la Habana, en Cuba, se embarca en su día 85 de mala suerte a probar en el mar una vez más. Sin embargo, no contaba con que la naturaleza es mucho más sabia de lo que jamás será el hombre.


Mis queridos seres míticos, yo de nuevo por aquí, intentando ponerme al día con todas las reseñas que sé, todavía, les debo. Pero bueno, por hoy les traigo una reseña de un libro que, en lo personal, me llama mucho la atención. Esta edición en particular me es muy entrañable porque fue un obsequio de una increíble maestra que tuve a lo largo de la universidad y que, con el paso de los años, se volvió una entrañable amiga. Si llega a leer esto algún día, a mi Santiago personal, muchísimas gracias. Pero es momento de dejar al lado los sentimentalismos, ponernos en modo Hemingway, y entrar de lleno en la reseña.

He de comenzar hablando de la edición en sí misma. Físicamente consta de una letra clara y grande que las personas con miopía y astigmatismo agradecemos por montones, de tal manera que no cansa para nada. Por si eso fuera poco, cuenta con un hermoso prólogo de Juan Villoro que, en serio, aporta mucho al libro en general. Si bien, advierto, da algunos spoilers -sobre todo para los que jamás se han acercado a este escrito-, también ayuda a comprender esas sutilezas que Hemingway tiene para nosotros a lo largo de todo el escrito.

 ¿Por qué habrá pájaros tan finos y delicados 
 como las golondrinas de mar cuando 
 el océano puede ser tan cruel? 

Ernest Hemingway, El viejo y el mar (trad. Miguel Temprano García).
DeBolsillo, Ciudad de México, 2da ed., 2019, p. 53.

Por algún motivo siento que cada que se habla de Hemingway se dicen montones de cosas técnicas respecto a él, e intentaré no hacer eso. Hay estudios, tesis enormes, sobre su obra y vida. Pero como es bien sabido, yo lo que deseo es transmitirles mi amor por los libros de esta manera de fan, como la lectora que soy más que como la profesora o literata. Así que intentaré mantenerme en esa área y disculpen si salto mucho a los tecnicismos. 

De los personajes, pese a que no se sabe mucho de ellos, tengo demasiado qué decir. Comenzaré con el muchacho de 22 años llamado Manolin, quien solía acompañar al protagonista a pescar. Me parece un chico noble que está entre la espada y la pared, entre esa necesidad de complacer a su padre y aquello que le dicta el corazón. Creo que, por la edad que tiene, muchos muchachos se sentirán identificados. ¿Hacer lo que es debido, o hacer lo que se desea? ¿Entrar a una carrera que odio y me dará millones, o seguir mi sueño? Si bien parece que el personaje se concentra en la pesca, en algo básico y diurno, la realidad es que, al extrapolarse (exagerar los límites), podemos ver que el mismo llega mucho más lejos y puede aplicarse a manera de metáfora en la vida cotidiana. 

 Nadie debería estar solo de viejo, pensó. 
 Pero es inevitable.

Ibid., p. 74.

Luego aparece Santiago mismo, ese anciano, viudo, sumamente cansado, que pesca a la antigua mientras la tecnología pesquera avanza. Él se queda atrás porque es lo que sabe y conoce. Tiene las manos encurtidas, llenas de cicatrices del sedal. Es fanático del baseball, con el que acalla sus pensamientos, como un hombre recio y poderoso de su época. A lo largo de la novela poco habla de sentimientos. Y no se piense que es por machismo ni mucho menos, es sólo el reflejo de la sociedad de su tiempo, de aquello que el hombre debía de ser, incluso si tenía montones de cosas en la cabeza. Es un hombre que va a la par con la naturaleza, que presenta sus respetos a los animales que la habitan. Tiene un montón de sabiduría que comparte con nosotros a lo largo del escrito mediante frases contundentes y bien trabajadas.

Como se pueden dar cuenta, estos personajes pueden ser cualquier persona, se pueden adaptar a cualquier entorno. No se trata sólo de pescadores, son seres que se enfrentan a situaciones y que tienen que sortearlas de distintas maneras y de acuerdo a sus posibilidades y lo que llevan aprendido en la vida. Y creo que ahí está el valor de la novela misma. Es un libro que trata de la existencia, de la humanidad que nos rodea. Trata de todos y cada uno de nosotros en diferentes niveles y etapas. 

Sobre el resto no hablaré. No diré nada sobre Joe DiMaggio y el baseball, no diré nada sobre las ideas referentes a Moby Dick, sus similitudes y diferencias. Creo que ya hay muchas personas que hablaron al respecto, que hicieron maravillosos estudios sobre el tema. En realidad, se trata de un libro bien hecho. Se nota la madurez del autor en ese punto de su vida, ese resurgir como Santiago luego de una dura y larga batalla que casi lo lleva a la locura.

 —Pero el hombre no está hecho 
 para la derrota— dijo—. 
 Al hombre se le puede destruir, 
 pero no derrotar.

Ibid., p. 134.

Ahora bien, para terminar, es momento de que lo recomiende a las personas y, sinceramente, se me complica mucho. Dudo que un chico en la adolescencia pueda comprender. No digo que no exista un adolescente ejemplar que lo entienda y adore, pero la mayoría no lo hará. Así que, si debo recomendarlo, se lo recomiendo a quien sea que crea que no puede seguir adelante, que la vida lo ha vencido. Se lo recomiendo a los que piensan que algo no es para ellos, no porque no tengan talento o las capacidades, sino porque el universo parece conspirar contra ustedes. Y ahora les pido un favor. Si en algún momento se topan con el libro, comienzan a leerlo y deciden dejarlo, no se deshagan de él. Crezcan un poco, sean una fruta un poco más madura y luego vuelvan. Les garantizo que algo habrá entre sus páginas que los haga recordar los momentos malos y cómo terminaron por volverse Santiago.

Saludos enormes,