El Conde de Montecristo

Autor: Alejandro Dumas.
ISBN: 978-987-1512-50-8
Género: aventuras, novela histórica
Páginas: 844

Saga: No.
Sinopsis:Entre la extensa obra de Alejandro Dumas, padre, se destacan por sobre todo las novelas de inspiración histórica y religiosa. Su genial modo de explicar y describir las costumbres de su época, permite al autor resaltar ciertas características, entre las cuales los duelos para lavar el honor, la caballerosidad, la generosidad y la hidalguía se manifiestan acentuadamente en algunos protagonistas, y contrastan con la extrema miserabilidad, el egoísmo y la codicia de otros. En esta obra en particular, Montecristo es un vengador que queda casi atrapado en las redes de su venganza, pues comprende que en la naturaleza humana conviven el bien y el mal, y que no es justo castigar en los hijos los errores cometidos por sus padres.

Opinión personal:


El Conde de Montecristo es quizás la novela más importante entre la inmensa obra de Alejandro Dumas, junto a Los Tres Mosqueteros, claro. Y la verdad que por ser la primera del autor que leo no pude quedar aún más maravillado, es simplemente perfecta en mi opinión.



El protagonista es Edmundo Dantés, marinero de Marsella que sueña con tener la vida perfecta, casarse con su amada Mercedes, catalana, y ser felices para siempre, pero no va a poder ser. Al volver de un viaje, tres personas, algunas creídas amigas por Edmundo traman un complejo plan para quitarle la libertad y así poder obtener ellos sus beneficios. 



Estos tres individuos son: Danglars, contador del barco donde también está Edmundo, quiere ser capitán tras la muerte del anterior, pero no puede porque el armador Morrel, quien también tendrá un importante papel en el libro, eligió a Edmundo para ser el nuevo primero al mando. Fernando, primo de Mercedes que además sueña poder casarse con ella. Y también está Caderousse, vecino de Edmundo y su padre, pero prefiero no contarlo como una de las mentes del plan, ya que estaba borracho al momento de su escritura.



Edmundo Dantés es acusado falsamente el mismo día de su boda con Mercedes por los tres ya nombrados de ser un agente bonapartista, ya que en su último viaje habían parado en la Isla de Elba, recordemos Napoleón fue exiliado a ella, y recogió una carta para un importante bonapartista afincado en Francia. Edmundo es interrogado por el sustituto del procurador del rey, Villefort, quien acuerda con él su liberación, pero mintió y quemó la única prueba que lo podría incriminar; la carta que traía desde la Isla de Elba, la cual estaba dirigida a M. de Nortrier, que casualmente es el padre de Villefort. Edmundo es llevado sin que lo sepa al Castillo de If, donde pasará una larga condena donde conocerá al abate Faria.



Con él aprenderá muchisímas cosas y ganará otras tantas, incluyendo una enorme riqueza que lo ayudará a poder ejecutar su venganza, pero no todo lo que sangra muere, durante su venganza habrá perdidas que él no quería...



En el medio de todo esto hay bastantes subtramas, con un millar de personajes, todos importantes por igual, la mayoría aporta su parte a la gran telaraña que es la trama de El Conde de Montecristo.




Me encantó esta novela, me hizo pasar por todos los estados de animo habidos y por haber, se la recomiendo totalmente a cualquiera, siempre y cuando tenga la paciencia de leer más de 800 páginas, claro. Sin más, El Conde de Montecristo se ganó un lugar entre mis libros favoritos.